Se
ponen a remojo los garbanzos la noche anterior en agua caliente con un poco de bicarbonato. A la mañana
siguiente se escurren y se meten en una redecilla dentro de la olla junto con
el laurel, el puerro, las zanahorias, un trozo de cebolla y aceite. Cerramos la olla y cuando suban las dos rayita de la válvula contaremos 30 minutos. Se retira la olla del fuego y se espera a que bajen las rayitas de la
válvula y haya salido todo el vapor para poder abrir la olla. Se pasan los
garbanzos a una cazuela con el caldo.
En
una sartén doramos los dientes de ajo y los tiramos. En ese aceite pochamos la
cebolla picada y cuando esté hecha le añadimos media cucharita de pimentón,
vertiendo todo en los garbanzos. Se fríe una rebanada de pan hasta dorarla y se
machaca en el mortero con ajo y perejil añadiéndolo todo a los garbanzos. Se
echa la sal y se deja cocer unos 15 minutos todo junto.
También
puede añadírseles arroz, que coceremos con todo lo anterior durante 17 minutos.
En este caso habrá que dejar más caldo a los garbanzos porque el arroz lo
absorbe.
En un recipiente mezclamos la harina con la levadura y
reservamos.
En otro recipiente ponemos los huevos y la yema con el
azúcar, la ralladura de limón, la pizca de sal y batimos hasta espumar. A continuación
agregamos el moscatel y continuamos batiendo. Seguidamente el aceite y batimos.
Por último tamizamos la harina con la levadura y removemos con movimientos
envolventes.
Ponemos papel antiadherente en un molde y untamos las
paredes con mantequilla. Vertemos la crema e introducimos en la segunda altura
del horno por abajo a 150 grados durante 50 minutos.
Sacamos, esperamos que se temple para desmoldar y pincelamos
la superficie con la glasa que habremos hecho mezclando el azúcar glas con un
chorrito de limón para formar una cremita. Dejamos enfriar.
1/2 cucharita de levadura liofilizada o 2 grs. de levadura
fresca de panadero
Infusión aromática:
150 ml leche
Cáscara de limón y naranja
1 ramita canela
Masa:
140 grs. de Prefermento
60 grs. de infusión aromática
340 grs. harina de fuerza
80 grs. Azúcar
1 sobre levadura liofilizada de panadero o 15 grs. Levadura
fresca
2 huevos medianos
60 grs. mantequilla
2 cucharitas de ron
3cucharitas agua de azahar
Ralladura de limón y naranja
Pizca de sal
Decoración:
1 huevo batido
Guindas
Mandarina confitada
Piñones
Azúcar con agua de azahar
Nata montada
PREPARACION:
Para elaborar el prefermento mezclamos en un recipiente los
ingredientes y amasamos con la mano hasta formar una bola. La dejamos tapada
con papel film durante 3 horas. Otra opción es prepararlo la noche anterior y
dejarlo que fermente un par de horas. A continuación lo tapamos con papel film
y lo metemos a la nevera toda la noche. A la mañana siguiente lo sacamos y lo
dejamos media hora a temperatura ambiente.
En un recipiente ponemos la ramita de canela, cáscara de limón y
naranja y la leche para elaborar la infusión aromática. Dejamos que hierva un
minuto y lo dejamos reposar tapado fuera del fuego para que se infusione. Una
vez frío lo colamos y reservamos.
En un recipiente mezclamos 60 grs. de infusión aromática con
el ron y el azahar de manera que obtengamos 100 grs. de líquido. Reservamos.
En otro recipiente grande mezclamos la harina con la
levadura, la pizca de sal, el azúcar, el prefermento a trozos, ralladura de
limón y naranja y los 2 huevos. Incorporamos el líquido de la mezcla de
infusión y amasamos unos minutos. Por último, agregamos la mantequilla a
trocitos y amasamos con la mano para que se disuelva y se integre bien.
Amasamos unos 10 minutos. Espolvoreamos
una pizca de harina para ayudarnos. Una vez hecha la masa la dejamos reposar
tapada con film hasta que doble su volumen. Si queremos acelerar el levado
podemos introducirla en el horno a 40 grados, pero no superar esa temperatura.
Una vez ha levado, la sacamos a la encimera y la
desgasificamos aplastándola con las manos. La dejamos reposar 10 minutos para
que se relaje la masa. Ponemos la masa sobre papel de horno y le hacemos un
agujero en el centro a partir del cual, estirando suavemente con las manos,
iremos dándole forma de roscón. Ha de quedar un agujero grande en el centro ya
que al fermentar y hornear, se empequeñece. Dejamos que doble el volumen. Una vez
ha fermentado, lo pintamos con huevo batido y lo decoramos a nuestro gusto:
mandarina confitada, guindas, piñones, azúcar con agua de azahar…
Precalentamos el horno a 220 grados e introducimos la
bandeja con el roscón en la segunda altura empezando por abajo a 200 grados
unos 20 minutos. Sacar y dejar enfriar sobre una rejilla.
Cortamos el roscón por la mitad y rellenamos con nata montada.