Se lavan las papas y se colocan en una cazuela
con agua (medio dedo de agua por debajo de ellas) y se cuecen a fuego medio con
abundante sal gorda y la tapa de la cazuela. A los 10 minutos se pinchan con un
palillo para comprobar si están blanditas e inmediatamente se escurren sin
quitar del todo la tapa y dejando un dedito de agua. Se vuelven a poner al fuego,
destapadas y se va moviendo la cazuela para que la sal se adhiera a la papa.
Una vez se haya evaporado todo el agua, las sacamos y listo. Luego se sacan
para que no suden en la cazuela.
Hola Puri, Hay que ver cómo te desenvuelves entre fogones, una aragonesa preparando un plato típico de unas islas situadas a tantos kilómetros de tu tierra, jeje... Yo nunca probé las papas arrugadas, y creo que lo voy a dejar para cuando visite las islas, que aun nunca he ido. Por el aspecto me da la impresión de que resultan muy saladas, y seguro que no es tanto. Un beso, Puri.
Hola Puri,
ResponderEliminarHay que ver cómo te desenvuelves entre fogones, una aragonesa preparando un plato típico de unas islas situadas a tantos kilómetros de tu tierra, jeje...
Yo nunca probé las papas arrugadas, y creo que lo voy a dejar para cuando visite las islas, que aun nunca he ido. Por el aspecto me da la impresión de que resultan muy saladas, y seguro que no es tanto.
Un beso, Puri.
Noooo, no quedan saladas. Por dentro las papas no cogen la sal. Muchos besicos 😘
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