Con
un cuchillito limpiamos las costillas retirando la carne del palo y dejando
sólo la mollita. Salamos un poco y las freímos un poco en aceite sin hacerlas
del todo. Las sacamos a un plato con papel absorbente. Reservamos y dejamos
enfriar para que luego la bechamel se adhiera bien.
Preparamos
una bechamel espesita con nuez moscada y se impregnan las costillitas en la
bechamel. Dejamos que se enfríen y endurezca la bechamel y a continuación las
pasamos por huevo y pan rallado. Las freímos en abundante aceite bien caliente
hasta dorarlas.
En una sartén ponemos aceite y dos dientes de ajo. Cuando
empiecen a dorarse añadimos los filetes de hígado y los salteamos a fuego
fuerte por ambos lados. Retiramos a un plato.
En el mismo aceite vamos a freír cebolla cortada en tiras.
Salamos y cuando esté casi frita incorporamos los filetes de hígado fritos y
medio vaso de vino oloroso. Espolvoreamos pimienta molida y un poquito de
starlux. Dejamos que se evapore el vino y servimos.
Extendemos el cuello
de ternasco deshuesado y lo salpimentamos.
Encima de él ponemos la tortilla francesa que habremos hecho
redonda. Untamos con mermelada de piquillos la superficie de la tortilla y
colocamos pimiento rojo en conserva encima. A continuación colocamos los
boletus que habremos frito en una sartén y posteriormente los habremos
troceado. Enrollamos el cuello formando un redondo y lo atamos bien preto con
liza de cocina.
En la olla ponemos aceite y doramos unos dientes de ajo que
luego quitaremos. Metemos el redondo en ese aceite bien caliente para que se
dore bien y quede sellado. Luego vamos añadiendo zanahorias, cebolla, laurel,
perejil, la manzana pelada y troceada y se rehoga todo bien. Añadimos sal,
starlux y coñac, así como agua para
hacer la salsa que requiera.
Cerramos la olla y cuando hayan subido las 2 rayitas de la
válvula, bajamos el fuego al mínimo y contamos 25 minutos.
Pasado ese tiempo
esperaremos a que se vaya todo el vapor de la olla y la abriremos. Sacamos el
redondo. A continuación lo envolvemos en papel film y lo pretamos bien para que
conserve la forma y quede redondito.
Esperamos a que enfríe para poder quitarle la liza y
cortarlo en rodajas de 1 centímetro aproximadamente. La salsa la pasamos por la
batidora y la colocamos en una tartera. Incorporamos las rodajas del redondo y
calentamos todo junto suavemente. Otra opción es calentarlo en una fuente de
horno tapado con papel de aluminio a unos 100 o 150 grados-Probamos la salsa
para comprobar que está a nuestro gusto.
Salpimentamos los trozos de ternasco y los doramos en una
sartén con aceite y dos dientes de ajo. Una vez bien dorados por todos los
lados los reservamos en la olla. Incorporamos también a la olla parte del
aceite de haberlos frito y cuando haya cogido temperatura, agregamos una
chorrada de coñac. Dejamos que se evapore el alcohol y añadimos la cebolla
troceada en juliana recia y los pimientos cortados a cuadrados medianos.
Dejamos
que se rehogue todo junto. Salamos. Añadimos la hoja de laurel. Ponemos una
puntita de pimentón dulce y rehogamos.
Rallamos dos tomates maduros y los incorporamos
a la olla. Removemos y vertemos medio vasito de vino blanco y medio de agua.
Salamos y añadimos starlux.
Tapamos la olla y cuando suban las 2 rayitas de la válvula contaremos
25minutos. Transcurrido el tiempo, abrimos la olla y emplatamos.
Podemos espesar el caldito con un poco de espesante maicena.
Salamos los jarretes y los enharinamos. Los freímos en una
sartén con aceite y unos dientes de ajo. Reservamos.
En la olla ponemos aceite, cebolla picada, unos dientes de
ajo a láminas, un pimiento verde troceado, puerro troceado y laurel. Rehogamos
todo bien e incorporamos media cucharita de pimentón y media cuchara sopera de
harina. Añadimos agua y coñac hasta que los cubra y se condimenta con sal y
starlux. Cerramos la olla.
Dejaremos cocer 35 minutos una vez que hayan subido las 2
rayitas de la válvula.
Limpiamos las alcachofas y las cocemos en agua con sal y
perejil enteras. Una vez cocidas las sacamos y las rebozamos con harina y
huevo. Las freímos en una sartén con aceite caliente y una vez doradas por
ambos lados las añadimos al guiso dejando hervir suavemente todo para que
junten los sabores.
Salpimentamos los jarretes y los doramos en una
sartén con aceite y dos dientes de ajo. Una vez bien dorados por todos los
lados los reservamos en la olla. Incorporamos también a la olla parte del
aceite de haberlos frito y cuando haya cogido temperatura, agregamos una
chorrada de coñac. Dejamos que se evapore el alcohol y añadimos la cebolla
troceada en juliana recia y los pimientos cortados a cuadrados medianos.
Dejamos
que se rehogue todo junto. Salamos. Añadimos la hoja de laurel. Ponemos una
puntita de pimentón dulce y rehogamos.
Rallamos dos tomates maduros y los incorporamos
a la olla. Removemos y vertemos medio vasito de vino blanco y medio de agua.
Salamos y añadimos starlux.
Tapamos la olla y cuando
salga mucho vapor por la chimenea colocamos la válvula y cuando suban las 3
rayitas contaremos 20 minutos. Transcurrido el tiempo, abrimos la olla y
emplatamos.
Pelamos la capa exterior de las cebollas y les cortamos los
pelitos teniendo cuidado de no romperlas. Cortamos un casquete de la parte
superior de la cebolla y lo guardamos. Con un sacabolitas o una cucharita
vaciamos las cebollas y reservamos la cebolla que hemos quitado.
Relleno:
Ponemos aceite en una sartén y añadimos un diente de ajo
picado. Cuando comience a freírse incorporamos la mitad de la cebolla que
habíamos sacado con el sacabolitas. Salamos y cuando esté casi frita añadimos
el pimiento verde troceadito, el puerro picado, la zanahoria pelada y troceada,
el pimiento rojo trocead o. Salamos. Cuando esté todo frito añadimos los
piñones. Rehogamos e incorporamos la carne salpimentada. Refreímos bien con las
verduras y agregamos una chorradita de tomate frito. Reservamos.
Ayudándonos de una
cuchara rellenamos las cebollas con la farsa y les colocamos el capuchón que
les habíamos cortado.
En una sartén ponemos aceite y doramos las cebollas con
cuidado de no desmontarlas. Las colocamos en la cazuela donde las coceremos
posteriormente.
Salsa:
En una sartén ponemos aceite y freímos la mitad de la
cebolla que habíamos extraído del interior de las cebollas. Salamos. Una vez
frita la cebolla añadimos pimiento rojo en conserva y continuamos friendo. A
continuación agregamos media cucharada de harina y rehogamos. Añadimos tomate
frito casero y una picada de ajo y perejil junto con medio mortero de vino
blanco y otro medio de agua. Si tenemos caldo de verduras, podemos sustituir el
agua por el caldo. Salamos y condimentamos con starlux. Dejamos que se haga
todo junto unos minutos y lo pasamos por el pasapurés sobre las cebollas.
Ponemos al fuego y dejamos que cuezan a fuego suave hasta que estén blanditas. Aproximadamente
tardan 1 hora y media. Ayudándonos de una cuchara iremos regando las cebollas
con la salsa.
aceite, 2 ajos, 1 cebolla, 1
pimiento rojo de lata y 2 pimientos del piquillo, vino blanco, harina, tomate
frito y azúcar.
PREPARACION:
En una sartén ponemos un diente de ajo picado y antes de que
se dore incorporamos la cebolla picada, el pimiento verde troceadito y el
puerro y los ajos tiernos también troceados. Salamos y dejamos que se fría
todo. A continuación incorporamos la carne picada y removemos bien para que se
cocine con las verduras. Salamos, espolvoreamos pimienta molida y una vez
refrita añadimos una chorrada de tomate frito. Removemos y ponemos media
cucharada de harina que rehogaremos para verter seguidamente leche y formar una
pastita con la que rellenar los pimientos. Probamos de sal.
Dejaremos que escurra un poco el aceite que ha soltado la
carne en el relleno y una vez ha templado, ayudándonos de una cucharita pequeña
iremos rellenando los pimientos.
Los dejaremos en una tartera con la salsa de piquillos en el
fondo y calentaremos suavemente antes de servir.
Otra opción es colocarlos en una tartera y cubrirlos con
bechamel para posteriormente gratinarlos en el horno a 250 grados.
Salsa de pimientos:
En una cazuela ponemos un poco de
aceite, 1 ajo a láminas, una cebolla picada y los refreímos todo bien. A continuación
añadimos el pimiento rojo de lata y los dos pimientos del piquillo. Rehogamos y
añadimos 1 cucharada de harina. A continuación una buena chorrada de tomate
frito y vino blanco. Condimentamos de sal y azúcar y vertemos agua. Dejaremos
cocer 20 minutos y los pasamos por la
batidora.
Limpiamos las alcachofas quitándoles las hojas
exteriores y pelándoles el tronco. Les cortamos también las puntas, de manera
que nos quedemos con el corazón de la alcachofa. Reservamos.
Ponemos la olla con agua y sal e iremos
introduciendo en ella las alcachofas según las vayamos limpiando. Pondremos la
tapa a la olla y cuando salga mucho vapor por la chimenea colocaremos la
válvula y cuando suban las 3 rayitas tendremos cociendo unos 3 minutos.
Transcurrido el tiempo dejaremos que bajen las rayitas para poder abrir la
olla. Sacamos con cuidado las alcachofas y las dejamos escurrir sobre papel
absorbente. Una vez templadas les cortamos el rabito para poder mantenerlas en
vertical y con un sacabolitas les quitamos parte del interior que reservaremos
junto con los tronquitos.
En una sartén ponemos un poco aceite y le
añadimos un diente de ajo picado. Antes de dorarse incorporamos la cebolla
picadita y el pimiento verde troceadito y dejamos que se frían. A continuación
añadimos la carne salpimentada y la refreímos bien salándola. Incorporamos las
partes de la alcachofa que habíamos reservado y los tronquitos cocidos.
Refreímos todo y por último vertemos un poco de tomate frito casero. Dejamos
todo al fuego un poco y probamos de sal. Espolvoreamos nuez moscada y retiramos.
Ayudándonos de una cucharita rellenamos las
alcachofas con el relleno y la dejamos en una fuente de horno.
Preparamos la bechamel normalmente y cuando la tengamos
hecha le incorporamos unos pimientos del piquillo en conserva y batimos con la
batidora hasta conseguir una bechamel rosita. Cubrimos por encima las alcachofas
con la bechamel y gratinamos en el horno a 250 grados.
Presentamos con una salsita de guisantes en el
fondo del plato.
Lavamos la carne bajo el
grifo y dejamos que se escurra y se oree unos 15 minutos, sin secarla. A
continuación, ponemos 600 ml de agua con media cucharada de sal en la placa de
horno donde vamos a hacer el asado. Salamos la carne y la colocamos sobre el
agua. Echamos una cucharada de aceite de oliva por encima de la carne y la
metemos al horno precalentado a 130 grados durante 45 minutos. Pasado ese
tiempo, sacamos la carne, le damos la vuelta y la volvemos a meter a 130 grados
otros 45 minutos.
Transcurrido el tiempo,
sacamos la bandeja, damos vuelta a la carne, incorporamos medallones de patata
gruesos en las zonas donde no las tape la carne. Regamos todo con el jugo de la
placa y metemos al horno a 160 grados 20 minutos. Pasado el tiempo, sacamos la bandeja, damos la
vuelta a la carne y regamos nuevamente todo con el jugo. Volvemos a meter al
horno otros 20 minutos a 160 grados.
Pasado el tiempo, sacamos
la bandeja, damos vuelta a la carne y regamos todo con los jugos. Vertemos una
chorrada de coñac por encima de todo e introducimos al horno a 200 grados 20
minutos. Transcurrido el tiempo, sacamos la bandeja, damos vuelta a la carne y
regamos con los jugos. Introducimos en el horno la bandeja otros 20 minutos a
200 grados.
Finalmente, pasado el
tiempo, sacamos la bandeja, subimos el fuego a 250 grados y metemos la bandeja
5 minutos por el lado que no tiene piel y le damos a continuación la vuelta
para dorarlo por el lado de la piel. Cuando esté dorado a nuestro gusto, lo
sacamos y a comer.
No puede faltarle líquido a
la bandeja ya que si no, se secaría la carne y no quedaría jugosa.
Cortamos las patatas
en medallones no muy recios y los colocamos en una fuente de horno en la que
previamente hemos puesto un poco de aceite. Las salamos y añadimos medio vaso
de agua.
Introducimos en el horno a 200 grados a media altura unos 20
minutos y cuando estén casi hechas, sacamos la bandeja y colocamos encima las
costillas de ternasco saladas. Vertemos un
poco aceite por encima y una chorrada de coñac. Si vemos que le hace
falta, agregamos un poco de agua.
A los15 minutos aprox. damos vuelta a las costillas y
dejamos que se terminen de hacer subiendo la temperatura para que se doren a
250 grados y subiendo una altura la bandeja del horno.
1 tajo bajo de ternasco a trozos o bien cuello de ternasco troceado
sal
aceite
pimiento verde
cebolla
ajos
laurel
tomate frito
patatas
vino blanco
PREPARACION:
En cazuela:
En una cazuela ponemos aceite y sofreímos los
trozos de tajo bajo salados. A continuación incorporamos una cebolla troceada,
un pimiento verde troceado, laurel, ajo y tomate frito. Una vez rehogado todo
junto añadimos vino blanco y agua y salamos. Dejamos cocer hasta que esté
blandito.
En
una sartén freímos cuadritos de patata y los agregamos al guiso al final. En olla exprés:
El
cuello lo salamos y los doramos en una sartén. En la olla ponemos aceite de
freír el cuello y añadimos la cebolla troceada, el ajo, el pimiento verde a
trozos, zanahoria en rodajas y el laurel. Salamos y freímos un poco. Añadimos
tomate frito e incorporamos los trozos de cuello fritos, vino blanco, agua, sal
y starlux. Cerramos la olla y cuando salga vapor por la chimenea ponemos la
válvula y al subir las tres rayas contamos
15 minutos. Pasado ese tiempo retiramos la olla del fuego y esperamos
que salga el vapor. Abrimos la olla y pasamos el guiso a una rustidera
incorporándole cuadritos de patata fritos.