En
una cazuela ponemos abundante agua con sal y una chorrada de aceite. Cuando
empiece a hervir echamos los espaguettis y removemos para que no se peguen. Mantenemos
la ebullición hasta que la pasta esté cocida al dente. La sacamos a un
escurridor y la pasamos por el grifo de agua
fría para quitarle el exceso de almidón y quede suelta. Reservamos en una
cazuela añadiéndole una chorradica pequeña de aceite para que no se pegue.
En
una sartén ponemos aceite y añadimos 1 diente de ajo picado. Cuando el ajo
comience a bailar, añadimos la cebolla
troceada, el pimiento rojo troceado y la zanahoria pelada y troceada. Salamos.
Una vez fritos, incorporamos la carne picada
con otro poco de sal y dejamos que se fría todo a fuego fuerte. A
continuación vertemos una chorradica de vino y dejamos que se evapore el alcohol. Añadimos el
tomate frito y dejamos que se refría
todo junto. Probamos de sal y azúcar y vertemos sobre la pasta.
Ponemos
un recipiente grande con agua, sal y una chorrada de aceite a hervir. Cuando
haya empezado a hervir vamos echando las láminas de canelones una a una para
que no se peguen y removemos muy suavemente. Dejamos cocer unos 10 minutos.
Retiramos del fuego y escurrimos, pasando las láminas de pasta por agua fría y
escurriéndolas bien. Las dejamos colocadas sobre un paño limpio para
rellenarlas posteriormente.
Pelamos
los gambones y reservamos las cabezas y las pieles.
En
una cazuela ponemos un chorrito de aceite e incorporamos las cabezas de los
gambones y freímos para que suelten el sabor. Cubrimos de agua y salamos.
Dejamos cocer 10 minutos y colamos. Reservamos el fumet.
En
una sartén ponemos aceite y un diente de ajo picado. Añadimos 1 cebolla y un
puerro picados. Salamos y dejamos que se fría bien.
Incorporamos
los cuerpos de los gambones picados y el rape también troceadito pequeño.
Salamos y dejamos que se fría bien.
A
continuación añadimos 1 cucharada de harina. Rehogamos y agregamos caldo de
gambones para que se forme una pasta densa. Por último, añadimos los huevos
cocidos picados y reservamos el relleno para que se enfríe.
Rellenamos
las placas de canelón con la pasta del relleno y enrollamos haciendo un rulo.
Hacemos
una bechamel incorporando caldo de los gambones.
Ponemos
un poquito de bechamel en la base de la fuente y encima colocamos los
canelones. Cubrimos con el resto de bechamel y por encima añadimos pequeños
trocitos de mantequilla.
Ponemos una cazuela con abundante agua a hervir añadiéndole sal y
una chorradita de aceite. Cuando hierva a borbotones añadimos la pasta.
Removemos para que no se pegue al fondo y la dejaremos cocer hasta que esté a
nuestro gusto. Una vez cocida, la escurrimos y la pasamos por agua fría. La
reservamos añadiéndole una chorradita de aceite para que esté más suelta.
Ponemos agua a hervir en una cazuela y cocemos las coles de
bruselas con sal. Previamente les habremos cortado un poquito el tronquito y
les habremos retirado las primeras hojas exteriores. Pasados 12 minutos
aproximadamente las tendremos cocidas. Las retiramos y escurrimos. Las partimos
por la mitad y reservamos.
En una sartén ponemos aceite y añadimos la cebolla troceada.
Salamos y dejamos que se medio frían. A continuación incorporamos los champiñones
limpios y troceados y dejamos freír todo junto.
Una vez
fritos agregamos tomate frito casero y por último incorporamos la coles. Dejamos
que se cocine todo junto a fuego suave para que se entremezclen los sabores y
volcamos la salsa en la cazuela con los espaguetis. Calentamos todo junto y
servimos.
Lavamos
los espárragos y les quitamos la parte dura de la base. Los troceamos y dejamos
las puntas de los espárragos para saltearlas al final y decorar la fideuá.
Lavamos
las setas y las troceamos.
En
una sartén ponemos un poco aceite y el diente de ajo picado. Agregamos los
fideos y los doramos ligeramente. Retiramos y reservamos.
Salamos
los trozos de pechuga troceada yla
doramos en la sartén donde habíamos dorado los fideos. Una vez dorada la
retiramos y colamos el aceite para quitarle las impurezas.
Añadimos
un poco más de aceite si fuera necesario y freímos la cebolla y el puerro.
Cuando estén casi fritos incorporamos los pimientos troceados. Una vez se han
frito añadimos los espárragos trigueros troceados. Salteamos un poco y
agregamos las setas. Dejamos que se fría todo bien.
Una
vez se hayan frito agregamos una chorrada de tomate frito. Rehogamos. Incorporamos
los trozos de pollo fritos y los fideos. Rehogamos bien y añadimos5 cazos de caldo bien caliente y removemos.
Ponemos un poco de colorante. Si vemos que le falta caldo, le añadimos. El
fideo debe quedar cocido, pero no demasiado blando.
Una
vez ha cocido 10 minutos retiramos la tartera del fuego y dejamos reposar unos
minutos. Decoramos con las puntas de los espárragos que habremos salteado
ligeramente con un poquito aceite y sal.
En
una cazuela con agua hirviendo y sal ponemos las espinacas y las dejamos cocer
2 minutos. Las escurrimos y las estrujamos bien para quitarles todo el agua.
Han de quedar secas. Reservamos.
Pelamos las patatas y las lavamos. Las troceamos y las colocamos
en un recipiente con un poquito de sal y una chorradita pequeña de agua.
Tapamos bien con film e introducimos en el micro 9 minutos. Comprobaremos que
al pincharlas con un tenedor están cocidas.
Trituramos las patatas con un pasapurés y dejamos que se temple.
Añadimos al puré las espinacas picadas y mezclamos.
Añadimos sal, nuez moscada, 1 huevo, 1 cucharada de queso y la
harina poco a poco. Amasamos hasta que se forme una masa que apenas se pegue.
Para ello espolvoreamos harina en la encimera. Dejamos reposar unos minutos.
Sobre la encimera enharinada cogemos porciones de la masa y
formamos un churro. Cortamos pedacitos de2 cm aproximadamente y les damos forma
ovalada o redondita. Los dejamos en una superficie enharinada.
Una vez tenemos hechos todos los gnocchis, los cocemos en una
cazuela con abundante agua hirviendo con sal. Al principio se irán al fondo de
la cazuela, y cuando suban arriba y floten significará que ya están cocidos y
podemos sacarlos.
En una sartén ponemos un poco aceite y freímos media cebolla
troceada y la parte blanca de un puerro. Espolvoreamos sal y cuando esté frita
añadimos el tomate frito y el orégano. Probamos de sal y azúcar. Incorporamos
los gnocchi a la sartén con la salsa y calentamos todo junto.
Si queremos congelarlos los congelaremos antes de cocerlos
poniéndolos en una bandeja enharinada. Una vez congelados los podremos meter en
bolsitas de congelación y cuando queramos utilizarlos los sacaremos y
directamente los meteremos en el agua hirviendo, sin descongelar)
Ponemos
en la olla todos los ingredientes y cubrimos abundantemente de agua. Salamos.
Cuando
empiece a hervir desespumamos y cerramos la olla. Cuando salga vapor por la
chimenea ponemos la válvula y cuando suban las 2 rayitas contamos 30 minutos.
Pasado
ese tiempo retiramos la olla del fuego y esperamos que se vaya todo el vapor.
Abrimos la olla y colamos el caldo. Probamos de sal.
Añadiremos
sopa de bolitos, fideos, estrellitas…. (4 cucharadas por cada 4 cazos de caldo)
y dejamos cocer hasta que la pasta esté hecha.
Desmenuzamos
trocitos de jamón y pollo y los
incorporamos a la sopa opcionalmente o bien podemos reservarlos para hacer
croquetas.
Lavamos
la berenjena y la cortamos en rodajas no muy finas. Las colocamos en un plato y
las salamos. Las dejamos reposar media hora para que suelten el líquido.
Transcurrido el tiempo, las pasamos por el grifo de agua fría y las secamos muy
bien con papel absorbente.
En
una cazuela ponemos abundante agua con sal y una chorrada de aceite. Cuando
empiece a hervir echamos los macarrones y removemos para que no se peguen. Mantenemos
la ebullición hasta que la pasta esté cocida al dente. La sacamos a un
escurridor y la escurrimos completamente pasándola por el grifo de agua fría para
quitarle el exceso de almidón y quede suelta. Reservamos en una cazuela
añadiéndole una chorradica pequeña de aceite para que no se pegue.
En
una sartén ponemos aceite y añadimos unos dientes de ajo. Añadimos la cebolla
troceada y salamos. Una vez frita incorporamos el tomate frito y un poco de
orégano y dejamos que se refría todo junto.
En
una sartén con abundante aceite freímos la berenjena cortando cada rodaja por
la mitad. Una vez doradas las incorporamos a la salsa de tomate y vertemos todo
sobre los macarrones. Calentamos todo junto.
Por
último, en una sartén con una gotita de aceite salteamos los tomatitos cherrys
con una pizca de sal y los servimos acompañando el plato de pasta.
Comenzamos
lavando el calabacín y cortándole los extremos.
Ayudándonos
de un pelador, cortamos láminas de calabacín longitudinalmente. Posteriormente
las cortaremos en tiritas finas para formar los tallarines. Los colocamos en
una fuente con un poco de sal y los metemos al microondas 2 minutos, tapados
con film.
Los
sacamos y los ponemos a escurrir el agua que sueltan.
En
una sartén ponemos un poquito de aceite y añadimos el ajo picado. Enseguida
incorporamos el puerro y la cebolla picados. Salamos y dejamos que se frían.
Una vez fritos agregamos los langostinos pelados y troceados y los salteamos.
Añadimos el tomate frito y por último el bonito escurrido.
Incorporamos
los tallarines escurridos y les damos unas vueltas con el apaño.
En
una cazuela ponemos abundante agua con sal y una chorradita de aceite. Cuando
empiece a hervir introducimos los tallarines y removemos para que no se peguen.
Cuando se hayan cocido al dente, los escurrimos y pasamos por agua fría.
Reservamos.
Para
preparar la salsa, ponemos un poco de aceite en una sartén y freímos la cebolla
y el puerro picados. Salamos y una vez fritos incorporamos el tomate frito.
Reservamos
En
una sartén sin nada de aceite, ponemos el picadillo y vamos removiéndolo con un
tenedor para que se deshaga y se fría. Una vez frito, escurrimos todo e aceite
que ha soltado y lo añadimos a la sartén con el tomate y las verduras.
Vertemos
toda la salsa sobre los tallarines y ponemos al fuego para que se cocine todo
junto y se mezclen los sabores.
Ponemos agua abundante en una cazuela junto con una cucharada de
sal y una chorradita de aceite. Cuando hierva agregamos la pasta y removemos.
Dejamos cocer al gusto. Mejor si queda un poquitín al dente. Escurrimos y
pasamos por agua fría. Reservamos en una fuente.
Cortamos el tomate en daditos pequeños y los añadimos a la pasta
cocida junto con el atún escurrido, las olivas, el maíz, el pimiento rojo a
daditos, las nueces troceadas y los dados de queso. Mezclamos bien.
Hacemos un aliño con 3 cucharadas de aceite de oliva, sal y una
cucharada de vinagre de manzana. Batimos esta vinagreta y se la vertemos a la
ensalada. Dejamos en la nevera para enfriar.
En una cazuela ponemos abundante agua con sal yy un chorrito de
aceite. Cuando hierva a borbotones añadimos los macarrones. Removemos y dejamos
cocer hasta que estén al dente. Escurrimos y pasamos por agua fría para
cortarles el hervor y quitarles el almidón. Los reservamos en la cazuela
añadiéndoles un hilito de aceite.
Para hacer la salsa de queso, en una sartén ponemos un poco de
mantequilla o aceite. A continuación añadimos media cucharada de harina y la
rehogamos. Agregamos leche hasta conseguir una salsita e incorporamos los quesos.
Dejamos que se derritan. Espolvoreamos nuez moscada y pimienta molida y
añadimos un poquito de sal. Si la salsa está cremosita a nuestro gusto, la
vertemos en los macarrones y calentamos todo junto suavemente.
Si vemos que queda muy espesa le añadimos leche para aligerarla.
Por
cada 100 gramos de harina pondremos 1 huevo entero, una pizca de sal y una
cucharada de aceite.
Relleno:
300
grs. Espinacas (muy escurridas)
50
grs. Queso parmesano rallado
200
grs. Queso ricota o requesón (muy escurrido)
Nuez
moscada
Sal
Pimienta
molida
Piñones
PREPARACION:
Para
el relleno podemos cocer las espinacas y escurrirlas muy bien o bien saltearlas
directamente en una sartén con un poco aceite. Las picamos y la juntamos con el
queso ricota, el parmesano y la nuez moscada. Dejamos enfriar bien el relleno
en la nevera.
En un recipiente ponemos los ingredientes de
la masa y amasamos bien hasta hacer una bola de masa que no se pegue. Amasaremos
durante 10 minutos. Si vemos que se pega un poco, añadimos un poco más de
harina ya que dependiendo de lo grandes que sean los huevos, habrá que poner un
poco más o menos.
Dejamos
reposar media hora la masa en la nevera tapada con papel film y luego
extendemos la masa con el rodillo hasta dejar una plancha muy fina. Si vemos
que se nos pega un poco, espolvoreamos harina en la encimera.
Partimos
la masa en dos partes y extendemos con ayuda del rodillo y harina, una de las
bolas hasta dejarla muy finita. Haremos lo mismo con la otra bola de masa
intentando que sean del mismo tamaño. Taparemos una de las masas que hemos
extendidos hasta que la utilicemos, ya que si no, se nos secaría.
Vamos
colocando montoncitos de relleno separados unos de otros encima de la masa bien
finita. Humedecemos con agua las zonas sin relleno y colocamos la otra lámina
de masa encima. Presionamos con las manos para juntar las láminas por donde
habíamos humedecido con agua. Procuraremos que no quede aire dentro de los
raviolis. Presionamos bien los bordes para que queden unidos y no se salga el
relleno. Con un cuchillo o un cortador rizado para raviolis, vamos cortándolos
y dejándolos sobre un paño enharinado. Dejaremos secar los raviolis un poquito.
En
una cazuela ponemos abundante agua a hervir con sal y una chorradita de aceite
y cuando hierva añadimos la pasta. La coceremos unos 10 minutos. Escurrimos y
apañamos al gusto. (Con tomate, pesto, salsa roquefort, etc.)
También
podemos congelarlos una vez hechos y secos poniéndolos extendidos para que no
se peguen unos con otros. Una vez congelados los podemos juntar en una bolsa de
congelación y mantenerlos en el congelador bastante tiempo. A la hora de
sacarlos, los dejaremos fuera del congelador una media hora y los coceremos en
agua hirviendo.
Ponemos una cazuela con abundante agua a hervir añadiéndole sal y
una chorradita de aceite. Cuando hierva a borbotones añadimos la pasta.
Removemos para que no se pegue al fondo y la dejaremos cocer hasta que esté a
nuestro gusto. Una vez cocida, la escurrimos y la pasamos por agua fría. La
reservamos añadiéndole una chorradita de aceite para que esté más suelta.
En una sartén ponemos aceite y añadimos la cebolla troceada y el
puerro picado. Salamos y dejamos que se medio frían. A continuación incorporamos
el pimiento rojo y el verde troceados y dejamos que se fría todo. Por último
añadimos los champiñones laminados y dejamos freír todo junto.
Agregamos medio vadito de vermouth, dejamos que se evapore el
alcohol y por último añadimos el tomate frito. Dejamos quer se cocine todo
junto a fuego suave para que se entremezclen los sabores y volcamos la salsa en
la cazuela con los espaguetis. Calentamos todo junto y servimos.
En una cazuela ponemos abundante agua con sal y una chorrada
de aceite. Cuando empiece a hervir echamos las cintas y removemos para que no se peguen. Mantenemos
la ebullición hasta que la pasta esté cocida al dente. La sacamos a un
escurridor y la escurrimos completamente para quitarle el exceso de almidón y
quede suelta. Reservamos en una cazuela añadiéndole una chorradica pequeña de
aceite para que no se peguen.
En una sartén ponemos aceite y freímos cebolla troceada y
salamos. Una vez frita incorporamos un diente de ajo picado y la zanahoria
pelada y cortada a cuadraditos pequeños. Dejamos unos minutos que se refría y
añadimos la carne picadacon otro poco
de sal y dejamos que se fría todo. A continuación vertemos una chorradica de
vino blanco, dejamos que se evapore el alcohol y retiramos el exceso de aceite
que pudiera tener. Añadimos el tomate frito y un poco de orégano y dejamos que
se refría todo junto. Probamos de sal y azúcar y vertemos sobre la pasta.